La poda correcta da fuerza y vigor, mejora la floración y desarrollo de las plantas, favorece la adecuada distribución de las ramas, de modo que la luz del sol llegue también al interior de la planta, crezca de manera armónica y florezca mejor.
La Poda de Formación, como su nombre lo indica, se realiza con el fin de conducir el desarrollo de la planta, desde el principio, para un crecimiento de ramas bien dispuestas y equilibradas.
Especialmente para los frutales, se realiza durante los 3 ó 4 primeros años que van desde que se planta hasta que entra en producción. Es casi imprescindible hacerla y su objetivo es conseguir una forma adecuada para el árbol.
La Poda de aclareo se usa para eliminar ramillas de las zonas altas y densas de la planta que impiden la entrada de luz solar en el interior de la copa.
Poda de Limpieza que consiste en quitar elementos indeseables como ramas secas, chupones, ramas que enmarañen la copa, tocones secos, etc. Esta poda es necesaria en todas las especies y durante todos los años de la vida del árbol, sea frutal o árbol ornamental.
También es importante la época en que realicemos dichas podas. El momento ideal es a finales del invierno (para evitar los días de frío intenso).
Además, durante el invierno, al no tener tantas hojas, se visualizan mejor las ramas y así se sabe cual debemos cortar y cual no.
Esto no quiere decir que jamás se deba podar en primavera y verano. En esta época se pueden realizar s podas ligeras, y en invierno no se deben podar aquellos árboles que florecen al comienzo de la primavera, éstos ejemplares se podaran luego de que termine completamente su floración.
Finalmente un vídeo sumamente ilustrativo:
lacabanadelretiro 